Consecuencias sanitarias y ambientales derivadas del uso intensivo de agrotóxicos en Argentina



Por Patricio Eleisegui
En Twitter: @Eleisegui


A propósito del reciente Día Mundial de la Salud. Treinta (30) tuits que resumen parte del desastre generado por el modelo agroindustrial imperante. El grueso de estos datos tiene presencia y desarrollo en mis libros "Envenenados" y "AgroTóxico". El segmento político en su totalidad debe asumir lo grave del contexto.



1. En la Argentina se pulveriza, promedio, 7,6 litros de plaguicidas por habitante. Somos el país con mayor consumo de glifosato en el planeta, en términos de cantidad de población. USA promedia 0,42 litros del herbicida por habitante, Argentina, 4,3 litros por persona.



2. En Argentina se aplican 12 a 15 litros por hectárea sólo de glifosato -datos de la industria-. Se combina con atrazina, dicamba o 2,4-D. El agro de USA emplea la mitad. Previo a los transgénicos (1996), en nuestro país se aplicaban 3 litros por hectárea. Es un modelo adicto al veneno.



3. El negocio doméstico de los agrotóxicos es liderado por un grupo de hasta 25 compañías entre nacionales y extranjeras que, sumadas, facturan más de US$2.500 millones por año. De ese monto, US$1.000 millones corresponden sólo a la venta del cancerígeno glifosato.



4. Según UNLP y CONICET, las lluvias de Argentina presentan concentraciones elevadas de herbicidas como el glifosato y la atrazina. La carga máxima cuantificada de agrotóxicos en las precipitaciones locales es 20 veces superior a la registrada en USA, meca de los plaguicidas.



5. En apenas 10 años, en la provincia de Chaco la cantidad de escuelas destinadas a la atención de niños que habitan zonas fumigadas y sufren inconvenientes cognitivos, además de otros tipos de retrasos, pasó de 12 a 70 establecimientos.



6. Bajo el título “Plaguicidas: los condimentos no declarados”, UNLP presentó estudio en 2015 en el cual destaca que, de cada 10 muestras de frutas y verduras evaluadas en La Plata, 8 dieron positivo en residuos de agrotóxicos. Zanahorias y cítricos, los productos más contaminados.



7. Fabián Tomasi falleció el 7 de septiembre de 2018 en Basabilbaso, Entre Ríos. Sufrió polineuropatía tóxica y trastorno en sistema nervioso, más otras dolencias, tras su trabajo en la firma de fumigaciones Molina & Cia. Médicos y ANSES certificaron contaminación con agrotóxicos.



8. En su trabajo "Plaguicidas en el Ambiente", INTA apoya el veredicto de IARC que vincula al glifosato con el cáncer y, en simultáneo, explica que el rechazo de la EFSA europea a esa categorización no tiene sustento científico. Para INTA, la IARC es precisa.



9. Estela Lemes, directora de la escuela rural Bartolito Mitre, muy cerca de Gualeguaychú (Entre Ríos). Sobrevive con glifosato y clorpirifos en sangre. Fue mi 1° entrevistada para #Envenenados hace 9 años, cuando el establecimiento sufrió la 1° fumigación aérea. Sigue batallando.



10. 9 de cada 10 hisopos, toallas femeninas y tampones contienen residuos de glifosato. En tanto, la totalidad de las gasas y algodones que hoy llegan a los botiquines de los hogares se encuentra contaminada con el herbicida, según científicos del EMISA de la Universidad de La Plata.



11. Rocío Pared falleció en septiembre de 2017 a los 12 años en Mburucuyá, Corrientes. Comió una mandarina que previamente había sido inyectada con carbofurano. Se trataba de un cebo colocado por un productor -sin condena hasta el momento- para exterminar pájaros y ratas.



12. Se detectaron hasta 18 agrotóxicos en el agua que consume la población de Pergamino (Buenos Aires). La Justicia ordenó suspender fumigaciones por la contaminación que sufren barrios La Guarida, Luard Kayad y Villa Alicia. Intervención clave del doctor Damián Marino de la UNLP.



13. En 2015, la organización BIOS de Mar del Plata analizó muestras de orina de dos docenas de personas. El 90 por ciento de los evaluados dio positivo en glifosato o AMPA, el metabolito originado en la descomposición del herbicida cuando ingresa al organismo.



14. Entre 2011 y 2016, según SENASA, 98% de las partidas de peras ofertadas en mercados centrales de Buenos Aires, La Plata y Mar del Plata, 93% de apios, 91% de mandarinas, 85% de manzanas y 76% de frutillas, dieron positivo en hasta 20 variedades de insecticidas y fungicidas.



15. En julio de 2017, un trabajo del CONICET y el EMISA (UNLP) reveló que el glifosato aplicado ya no se degrada. El estudio, concretado en Urdinarrain (Entre Ríos), sostiene que la concentración del herbicida constatada en esa zona se encuentra entre las más altas a nivel mundial.



16. Mariela Leiva, maestra fumigada de la escuela rural 44 “República Argentina”, de Colonia Santa Anita (Entre Ríos). En octubre de 2017, la Justicia condenó a 1 año y 6 meses de prisión -en suspenso- a un productor y 2 fumigadores por pulverizar junto al establecimiento escolar.



17. En San Salvador, Entre Ríos, los tumores malignos provocan el 40% de las muertes. Es la capital nacional del arroz. Estudios de dos universidades nacionales confirmaron presencia de glifosato e insecticidas en el aire, el suelo y el agua de toda la ciudad.



18. En su trabajo "Plaguicidas en el Ambiente", el INTA reconoce que se ha detectado herbicida glifosato en productos industrializados a base de algodón transgénico, además de confirmar que las variedades BT multiplicaron la aplicación de insecticidas.



19. Nicolás Arévalo murió el 4 de abril de 2011 a los 4 años de edad. Intoxicado con endosulfan aplicado en tomateras junto a su casa en Lavalle, Corrientes. Inhaló el veneno y pisó un charco contaminado. Un año después murió José Carlos Rivero, 4 años. Mismo lugar. Causa idéntica.



20. 8 de cada 10 peces monitoreados en aguas del norte de provincia de Buenos Aires dieron positivo en contaminación con agrotóxicos. Análisis de INTA y CONICET: presencia de 17 pesticidas diferentes en los tejidos analizados y se llegó a ubicar 5 plaguicidas en un mismo ejemplar.



21. Ana Zabaloy, exdirectora de escuela rural 11, J. M. Estrada, San Antonio de Areco (Bs. As.). En 2014, tras una aplicación cercana con 2,4-D, sufrió parestesia hemifacial. Enfrentó complicaciones en su salud por aquel contacto. Falleció el 8 de junio de 2019. En la escuela rural 11, EMISA (UNLP) ubicó 7 agrotóxicos en agua y suelo.



22. 6 de cada 10 frutas y verduras adquiridas en verdulerías de Buenos Aires y evaluadas por científicos de UNLP dieron positivo en al menos un plaguicida. Incluso se constató presencia de hasta 3 agrotóxicos en un mismo artículo. Zanahoria, naranjas y lechuga, los más contaminados.



23. Toda la cuenca del Paraná está contaminada con herbicidas como el glifosato y formulaciones de insecticidas. Cipermetrina, endosulfan y clorpirifos encabezan con amplitud los indicadores de contaminación. Estudio de la UNLP y CONICET con asistencia de Prefectura Nacional.



24. Según reportes médicos y científicos locales, en Misiones 5 de cada 1.000 niños nacidos en zonas de producción de tabaco y yerba sufren mielomeningocele, malformación severa del sistema nervioso central. Poseen la médula abierta, genera incontinencia múltiple y otros trastornos.



25. Barrio Ituzaingó -afueras de Córdoba capital-: se detectó contaminación masiva con endosulfan y glifosato. 114 niños con plaguicidas en sangre sobre 142 evaluados. 300 casos de cáncer en 5.000 habitantes. En agosto de 2012, la Justicia condenó a un productor y un aeroaplicador.



26. Trenque Lauquen (Buenos Aires). En 2015, la municipalidad solicitó un estudio a la Universidad del Litoral. Los resultados arrojaron contaminación con herbicida atrazina y el letal 2,4-D hasta en los árboles céntricos de esa ciudad y en las plantas junto al hospital municipal.



27. INTA monitoreó plaguicidas en peces de las cuencas Río Tercero-Carcarañá, Arroyo Pergamino-Río Arrecifes, Río Samborombón y Río Salado: todos los ejemplares de carpas mostraron concentraciones de herbicidas, insecticidas y fungicidas en músculos.



28. En Monte Maíz (Córdoba) 1 de cada 3 vecinos fallece de cáncer. Abortos espontáneos que superan 3 veces prevalencia esperada: 10% versus 3% de media nacional. Malformaciones congénitas: 72% superiores a tasa nacional. La ciudad alberga 20 galpones con máquinas para fumigar.



29. Uso intensivo de herbicidas creó epidemia de malezas resistentes. De colocarse estos vegetales ya inmunes a glifosato y otros plaguicidas en un mismo campo, ocuparían 3,5 millones de hectáreas. Casi 10% de la superficie cultivable del país. El 50% de los lotes sufre afectación.



30. En Argentina no existe ley nacional que regule la aplicación de agrotóxicos. Tampoco, estadísticas públicas sobre fabricación, venta y uso de estos venenos. Las agroquímicas, el sector privado -a través de las cámaras CASAFE y CIAFA-, mantienen en secreto toda información clave.




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Patricio Eleisegui
Email: patricio.eleisegui@gmail.com



Comentarios

pili wolffelt dijo…
hola patricio. soy productora del programa de radio de javier blanco. te queremos sacar al aire. te dejo mi mail piliwol@gmail.com

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